La intervención del Estado en la economía ha sido variable a lo largo de la historia incrementándose de forma notable tras la Gran Depresión del 29.
Sus objetivos son crear empleo, estabilizar los precios, potenciar el crecimiento económico, distribuir la renta equitativamente e incrementar intercambios comerciales con el resto del mundo. Para conseguirlos los gobiernos se valen de políticas macroeconómicas, entre ellas la política fiscal, esto es, las decisiones referentes al gasto público y a los impuestos. Ambas constituyen lo que llamamos presupuesto del sector público o presupuestos generales del estado,
Presupuestos del sector público = Ingresos públicos-Gastos públicos
Los ingresos públicos los obtiene el Estado fundamentalmente a través de los impuestos. Los gastos públicos son los gastos en servicios que el sector público ofrece a la sociedad ( defensa, sanidad, educación, obras públicas.... ). Analizad en este enlace cómo se ha repartido el gasto público en España en los últimos años.
Si los ingresos superan a los gastos habrá superávit presupuestario. Por el contrario habrá déficit público cuando no sean suficientes para cubrir los gastos.
Aquí tenéis una comparativa de nuestro déficit público en relación con el de otros países.
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